ya no vale la pena

Tengo tiempo para crear una entrada, no sé que escribir exactamente por lo que lo único que me ocurre es recurrir a mis poemas, es un recurso barato pero vale, tambien publico la carátula de mi próximo libro, que saldrá a la venta en cualquier momento.

CARTA EN UNA BOTELLA

Si he nacido, que me lo digan para no olvidarlo mientras vivo.
Busco alguien que me recuerde respirar después de despertar,
Y al dormir, y al pensar,
Por favor quédate conmigo hasta mañana.
Si he de amar, por favor que me besen seguido,
Que me lo digan a cada minuto,
Y al besarme me digan ¡respira! ¡Hazlo por mí!
Si he de vivir necesito que me lo recuerden para no olvidarlo,
Si he de amar por favor no olviden amar conmigo.
Necesito que me toques para saber que estas aquí o si te haz ido,
Porque no puedo ver si no me ayudas a abrir los ojos.
Si te lo digo créeme por favor, necesito que me creas,
No,
Mejor déjame creer en ti.
Cuando nazca voy a necesitar que alguien contenga mis pecados,
Que me calme y me lleve a la cama arrullándome y cantándome,
Por favor enséñame la música.
Cuando viva contigo no me dejes solo,
Quédate hasta que me duerma.
No me cierres la puerta cuando salga,
Dame la mano al caminar por la calle
O me perderé como hoy estoy perdido,
Vagaré por la niebla viscosa,
Respiraré por un tubo
O me encerraré en una caja hasta que alguien me desentierre.
Cuando nazca voy a necesitar alguien que me lo recuerde a diario,
Alguien que riegue las plantas y corte la mala hierba,
Alguien que me pregunte ¿por qué?
Alguien que me de un porqué.
Si hay alguien del otro lado del espejo que me avise para atravesarlo.
Remo, remo,
Navego bajo el espejo,
Miro hacia el cielo buscando una esperanza.
Cuando nazca necesitare que me sequen, que me arropen,
Que me abracen mientras descanso después de tanto remar.
Si me ves caminando por la calle corre hasta mí y no me sueltes más.
Amárrame a ti,
Voy a necesitar que alguien me sostenga,
No puedo sostener mis piernas,
No puedo ponerme de pie.
A quien sea que encuentre esta carta le ruego que no avise a nadie,
No haga alarma, ni mucho menos llame a las autoridades.
A quien reciba esta carta le ruego la utilice sabiamente,
Y si su corazón es grande,
Venga a rescatarme.

PD: favor hacer caso omiso

RODRIGO H. VIDAL

teatro en la ciudad

Hoy ha sido un día de ocio, me levanté tarde, de no ser por un mensaje de texto hubiese seguido durmiendo, no hice nada en todo el día, miré tele un rato, que es hacer nada por que ni siquiera requiere pensar un poquito. Babeé la cama, comí en ella, no había nadie que me regañara, como en mi pobre angelito, jugué un rato en el PC, y finalmente me afeite, era necesario porque entraba a trabajar a las siete y media. Un día de los malos en el trabajo, de esos en que gastas más en pasaje y vuelves con lo puesto. Al llegar a mi casa mi madre me estaba esperando para que le hiciera un dibujo, claro desde que volvió a scouts tiene que preparar actividades para los niños vestidos de huevón, pero el huevón que tiene que hacerle sus cosas soy yo. Igual me quedó decente el mamarracho, claro que ella lo agarró al tiro y lo empezó a recortar, ¡un rompecabezas!, me dijo, mejor que ellos lo dibujaran entonces, así no me rompía la espalda dibujando. “Hazlo por ellos” no me lo dijo pero lo pensó, ¿cómo lo sé? Fue su argumento cuando me pidió que volviera con ella al grupo, incluso me llevo con un falso pretexto y me hizo trabajar con ella un par de veces, pero eso sólo sirvió para confirmar mi decisión de no querer volver. Eso sería una involución, no niego todo lo que aprendí, ni lo importante que fueron en mi infancia, creo que gran parte de lo que soy hoy, es gracias a los scouts, pero ya perdí toda la inocencia que me permitió pertenecer al movimiento por tantos años, sin duda todos cambiamos de mentalidad –para bien o para mal -.

Esto de escribir en este blog, aun sabiendo que nadie lo lee, y haciendo un esfuerzo por escribir en el que comienzo narrando o diciendo cosas sin sentido, como corriente de conciencia, pero con puntos y comas, me lleva por caminos insospechados, o quizá demasiado obvios, ¿Qué estoy haciendo en educación? Los scuots son una oportunidad única de practicar la educación, pero a mí me resulta hasta desagradable pensar en ir nuevamente.¿Será este un síntoma claro de mi falta de vocación o será simplemente una aversión desarrollada por mí hacia el movimiento scout?

¿ESTAR O NO?

Mi fuerte no es la palabra hablada, no me cuesta hablar en público, muchos dirían que hablo demasiado, me refiero a tener buenos temas de conversación, o tolerar el hueveo. Digamos que cuando conozco gente la impresión que se llevan de mi es la de una persona “calladita” o tímida, y eso me choca, por que cuando se dan cuenta que su impresión estuvo errada hacen comentarios estúpidos, como “oh no me lo esperaba de ti” y eso no me gusta, pero me cuesta ser yo mismo en todas las situaciones, lo que me lleva a la existencial pregunta: ¿Quién soy yo? o ¿Cómo soy?
Soy a veces irritante, lo sé, insoportable, lo sé, detestable, también lo sé. El punto es si debo cambiar en algo mi conducta, últimamente me he estado cuestionando esto. Si mis relaciones con los demás no son como las quiero, el problema puede estar dentro de mi. Pero cambiar no es tan fácil, es un proceso que lleva tiempo, que demanda compromiso, pero que en mi caso también requiere moderación, a lo mejor para algunas cosas soy demasiado apasionado, eso me hace defender lo que pienso con mucha fuerza y creo que en este proceso suelo ser mal interpretado. Cuando discuto no estoy enojado, es algo que disfruto, que me enriquece, y si mis amigos y compañeros no lo entienden así tal vez deba cambiar de amigos y compañeros. Ese sería un cambio viable, chao universidad, y gente del lugar, o ¿será sólo dentro de la facultad que me sucede esto?......, quizás es el hecho de estar en un lugar que no es el mío. La conclusión que puedo sacar de este texto un tanto incoherente, es que mi vida necesita un cambio, mi tarea es descubrir cual es el cambio a realizar. La cuestión no es “ser o no ser”, es dónde ser.

ASÍ COMIENZA EL SINSENTIDO

No es fácil escribir algo cuando no se tiene mucho que decir, es por eso que este no es un espacio disponible, por que carece de todo sentido de existencia.
No es mi primer intento de blog, y espero que tampoco sea el último, los otros han sido un intento vano de dar a conocer mi trillada poesía, ahora no es eso lo que haré, mi intención es comunicar ideas y pensamientos, aunque si lo amerita también publicaré algo de “lírica” (ojala no sea una osadía de mi parte llamar así algo que carece de técnica), aunque no quiero publicar nada fuera de contexto. Ojala pueda sacar alguna sonrisa, pues es parte de un trabajo personal el hacerlo.
Lo primero que haré es explicar un poco quien soy y que hago en este mundo, la primera cuestión es algo que necesita tiempo para ser definida, y la segunda no tiene respuesta lógica así que decreto que esto es una perdida de tiempo, pero como lo dice el título de mi blog hay que ocupar espacio para que otros no lo ocupen.
Ahora lo concreto, toda la semana pasada me sentí como el mayor de los hueones, pues después de hacer unas maravillas en el periodo de toma de ramos me quede con un sólo curso, y claro tuve que asistir a la oficina de la jefa de carrera para que me solucionara el drama, pensé que eso era lo peor que me podía suceder, y que una semana mala sólo podría significar que vendría una semana de lo más buena, pero como todo buen hueon saqué cuentas apresuradas, y hoy día lunes acabo de perder mi celular, “manerita de empezar la semana”. Esto me indica que tengo un ataque de mala suerte crónica, entre otras cosas que me han sucedido esta semana; encontré mi credencial, eso a primera vista es bueno, sobretodo por que la había dado por perdida, lo malo es que ya saqué una nueva, esto como todo bien material me significó un gasto de dinero, y claro sacarme una nueva foto que en mi nueva credencial se ve demencial, ¡oh rima! Esto se ha vuelto reiterativo.
Antes que se me agoten las ideas conviene terminar, pero no desesperen pronto seguiré interviniendo el espacio para que nadie más lo ocupe.

Chau o nos vemos